Que todos puedan votar El voto es el derecho más básico de nuestra democracia, pero se ha excluido a demasiadas personas del proceso electoral. El Brennan Center elaboró una serie de soluciones firmes para asegurarnos de que todos los estadounidenses que puedan votar así lo hagan.
Defender nuestras elecciones Llevar a cabo elecciones justas requiere tener sistemas seguros y una administración independiente a la hora de emitir y contar votos. Por eso, el Brennan Center aboga por implementar un plan exhaustivo para actualizar la tecnología y salvaguardar la integridad de las elecciones, lo cual incluye proteger a los funcionarios electorales de posibles acosos e interferencias políticas.
Manipulación de distritos y representación justa Se supone que los votantes elijan a sus candidatos. Pero cuando los legisladores trazan los distritos electorales para acumular poder y beneficiar a su partido político, algunos votos cuentan más que otros. Las soluciones que recomienda el Brennan Center son las siguientes: comisiones independientes para dibujar los mapas de los distritos en cada estado y protecciones legales contra la manipulación extrema de los mismos.
Reformar la financiación de la política La población estadounidense está harta de la influencia de las grandes fortunas en las campañas políticas. La solución del Brennan Center: el financiamiento público de pequeños donantes para que el poder vuelva a las manos de los individuos.
Acabar con la encarcelación masiva Estados Unidos tiene menos del 5% de la población mundial y, sin embargo, cuenta con casi el 25% de todos los presos. La encarcelación masiva tiene consecuencias devastadoras—raciales, económicas y sociales—y no nos brinda mayor seguridad. El Brennan Center genera soluciones innovadoras, basadas en los datos, para acabar con la encarcelación masiva.
Proteger la libertad y seguridad nacional Seguridad y libertad van de la mano. El Brennan Center combate los abusos del poder ejecutivo y trabaja por implementar políticas de seguridad nacional que garanticen la seguridad de cada residente de los Estados Unidos y que, al mismo tiempo, protejan nuestros derechos de privacidad, libertad de expresión y transparencia del gobierno.