En julio de 2019, el Brennan Center for Justice publicó el informe Diversidad en las cortes supremas estatales, que detallaba las enormes desigualdades raciales, étnicas y de género que tienen las cortes supremas estatales de toda la nación, a partir de los datos correspondientes a un período de más de 60 años. Este nuevo análisis incluye los últimos datos sobre la composición de las cortes supremas estatales al mes de mayo de 2022, con información actualizada sobre la demografía y la experiencia profesional de los magistrados y las magistradas de las cortes supremas estatales. El informe original también se había actualizado en febrero de 2020 y en abril de 2021.
Estos son algunos de los hallazgos más importantes de nuestra última actualización:
- En 20 estados, ningún juez ni ninguna jueza se identifica como persona no blanca, incluso en 12 estados donde las personas no blancas componen por lo menos el 20 por ciento de la población.
- No hay ningún juez ni ninguna jueza de raza negra en 28 estados.
- No hay ningún juez ni ninguna jueza de la comunidad latina en 39 estados.
- No hay ningún juez ni ninguna jueza de origen asiático-americano en 43 estados.
- No hay ningún juez ni ninguna jueza de la comunidad nativa en 47 estados.
- Tan solo el 18 por ciento de los jueces y las juezas de todas las cortes supremas estatales son de raza negra, de origen latino, asiático-americano, indígena o multirracial. Pero las personas no blancas representan más del 40 por ciento de la población total de la nación.
- El 59 por ciento de los cargos de jueces en las cortes supremas estatales están ocupado por jueces hombres.
- En 9 estados, hay solamente una jueza mujer en los estados de sus cortes supremas.
- El 39 por ciento de los jueces y las juezas que actualmente ocupan las magistraturas supremas estatales antes se desempeñaban como fiscales, mientras que tan solo el 7 por ciento antes eran defensores públicos.
Últimos cambios
Desde la última vez que recopilamos datos en abril de 2021, ha habido cambios en 29 cargos de la magistratura de las cortes supremas estatales: asumieron su cargo 25 jueces y juezas, incluido un magistrado nombrado temporalmente para ocupar una vacante, y cuatro cargos siguen sin ocupar. De los nuevos jueces y juezas que asumieron su cargo, uno fue elegido mediante el voto y los 24 restantes fueron nombrados.
En su conjunto, los nuevos jueces y juezas reflejan una mayor diversidad demográfica en las cortes supremas estatales. De estos 25 jueces y juezas, 15 son mujeres, 10 son personas no blancas y siete son mujeres no blancas. En dos estados, Maine y Vermont, se juró al primer juez no blanco y a la primera jueza no blanca, respectivamente, en la historia de estos dos estados.
Sin embargo, en otros estados se observó poca mejoría en la diversidad de sus cortes supremas o directamente una cierta disminución en su diversidad. Quince de los nuevos jueces y juezas son de raza blanca, incluso en siete estados donde la población no blanca representa por lo menos el 20 por ciento de su total (Alaska, Arizona, Maryland, Nueva York, Oklahoma, Tennessee y Texas). En Alaska y Tennessee, se sumaron solo jueces de raza blanca a una magistratura que ya era exclusivamente blanca. La Corte de Apelaciones Penales de Oklahoma, el máximo tribunal penal del estado, perdió a su única jueza mujer cuando el magistrado William Musseman reemplazó a la magistrada Dana Kuehn.
En general, la demografía de las cortes no ha tenido demasiados cambios. A nivel nacional, el porcentaje de jueces y juezas de raza no blanca aumentó apenas del 17 por ciento registrado en abril de 2021 a un 18 por ciento, y el porcentaje de juezas mujeres también aumentó del 39 al 41 por ciento. Este año, el 40 por ciento (10 de 25) de los nuevos jueces y juezas son de raza no blanca, un aumento comparado con el año pasado, cuando eran el 29 por ciento (12 de 41).
Con respecto a la diversidad profesional, 14 (56 por ciento) de los nuevos jueces y juezas tienen experiencia como fiscales. Solo dos de los nuevos jueces y juezas tienen experiencia como defensores públicos y dos han trabajado en servicios de asistencia legal civil. La proporción de los nuevos integrantes de las cortes con experiencia como fiscales es mucho más alta que la proporción de todos los jueces y todas las juezas con esta misma experiencia que ya integraban las cortes supremas estatales (39 por ciento).
Hitos notables
Misuri. La magistrada Robin Ransom asumió su cargo en la Corte Suprema de Misuri el 8 de junio de 2021. Se convirtió así en la primera jueza mujer de raza negra y la quinta jueza mujer en la historia de la Corte Suprema de su estado. Antes de ocupar este puesto, se desempeñó como jueza en la Corte de Apelaciones de Misuri, Distrito Este, y jueza y comisionada del tribunal de familia en el Tribunal del Circuito 22 de Misuri. Es también la única jueza con experiencia como defensora pública de la actual Corte Suprema de Misuri.
Vermont. La magistrada Nancy Waples se convirtió en la primera persona no blanca en asumir el cargo de jueza de la Corte Suprema de Vermont, cuando juró su cargo el 18 de marzo de 2022. La magistrada Waples, hija de inmigrantes chinos, nació en Toronto y se hizo ciudadana estadounidense en 1977. Se desempeñó como jueza en el Tribunal Superior de Vermont desde 2015 hasta 2022. El gobernador Phil Scott la nombró para reemplazar a la jueza Beth Robinson, que dejó la corte suprema del estado para asumir un nuevo cargo en el Tribunal Federal de Apelaciones para el Segundo Circuito. La magistrada Robinson se convirtió así en la primera jueza de la comunidad LGBTQ en la historia de los tribunales federales de circuito.
California.El 28 de marzo de 2022, se juró a la magistradaPatricia Guerrero como la primera jueza latina en la historia de la Corte Suprema de California. Fue nombrada por el gobernador Gavin Newsom y confirmada por la Comisión sobre Nombramientos Judiciales de California por unanimidad. Desde 2017 hasta 2022, se desempeñó como jueza asociada en el Tribunal de Apelaciones del Cuarto Distrito. La comunidad latina es el grupo étnico más grande de California: de acuerdo con el censo de 2020, los latinos componen el 39.4 por ciento de la población total del estado.
Maine. El magistrado Rick Lawrence juró su cargo en la Corte Suprema de Maine el 12 de abril de 2022. Es el primer juez de raza negra en la historia del máximo tribunal de su estado. Sirvió como juez de distrito durante más de 20 años y era vicepresidente de los Tribunales de Distrito de Maine desde abril de 2020.
Maryland. La magistrada Angela Eaves juró su cargo en la Corte de Apelaciones de Maryland, el máximo tribunal del estado, el 12 de abril de 2022. La jueza Eaves es panameña y de raza negra, por lo que se convirtió en la primera magistrada hispana de su estado. Es también la única magistrada de la corte con experiencia en servicios de asistencia legal civil. Fue nombrada para ocupar la vacante que dejó el magistrado Robert McDonald, cuando este alcanzó la edad de jubilación obligatoria del estado en febrero de 2022. Cuando el gobernador Larry Hogan publicó la vacante por primera vez a comienzos de año, las siete solicitudes recibidas provenían de candidatos de raza blanca. Entonces decidió volver a publicar la vacante “para atraer la mayor diversidad posible de candidatos y candidatas, en consonancia con su compromiso por la diversidad y la participación”. La Dra. Eaves presentó su candidatura para el cargo durante esa segunda ronda.
Illinois. El 10 de mayo de 2022, la Corte Suprema de Illinois nombró a la jueza de apelaciones Lisa Holder White para ocupar una vacante en la corte suprema. La Dra. Holder White asumirá su cargo en la corte suprema del estado en julio después de la jubilación de la magistrada Rita Garman. Holder White será la primera jueza mujer de raza negra en la historia de la corte suprema de su estado. En la actualidad se desempeña como jueza en la Corte de Apelaciones de Illinois del Cuarto Distrito y tiene experiencia como abogada en firmas privadas, como defensora pública y como secretaria de la fiscalía estatal del condado de Macon.
Diversidad racial, étnica y de génerofootnote1_BmR49g1E9HijGD7ZzYg4OqS0iulN9JfWbE0VQjdFS7Q_f5jYolnBYMhj1Este análisis se basa en datos que muy gentilmente el profesor Greg Goelzhauser de la Universidad del Estado de Utah compartió con el Brennan Center y que incluyen información demográfica de los magistrados y las magistradas que formaron parte de las cortes supremas estatales entre 1960 y 2014. El Brennan Center actualizó esos datos para cubrir los años que le siguieron hasta el 2022 y agregó información demográfica más detallada y datos sobre la experiencia profesional de jueces y juezas. Para identificar su raza, etnicidad y género, el Brennan Center analizó fuentes secundarias con un alto nivel de credibilidad como, por ejemplo, declaraciones biográficas, obituarios, artículos periodísticos y membresías declaradas de organizaciones afines. En los casos donde no había ningún dato público disponible sobre la raza o etnicidad de un juez o una jueza, nos comunicamos directamente con los tribunales. Con esta metodología, no pudimos verificar la raza ni etnicidad de 6 de los 340 jueces y juezas en ejercicio. Por lo tanto, estas personas fueron categorizadas como jueces que “no se han identificado públicamente como personas no blancas”.
Tener tribunales diversos es esencial para lograr un sistema judicial justo y aumentar la confianza del público en los tribunales. En nuestro país, ninguna de las cortes supremas estatales refleja la creciente diversidad de sus poblaciones.
En 20 estados, no hay ningún juez ni ninguna jueza en las cortes supremas estatales que se identifique como persona de color, incluso en 12 estados donde las personas de color componen al menos el 20 por ciento de su población total. Y lo que es más impresionante, en 15 estados no ha habido nunca un juez ni una jueza de raza negra en las cortes supremas.
Las mujeres tampoco tienen la representación que se merecen en los estrados de las cortes supremas estatales: hay una sola jueza mujer en las cortes supremas de nueve estados. Y como se mencionó antes, no hay ninguna jueza mujer en la Corte de Apelaciones Penales de Oklahoma, el máximo tribunal del estado para causas penales.
Tal como se analizó en el informe Diversidad en las cortes supremas estatales, la actual falta de diversidad en la judicatura se debe a varios factores, entre ellos, a una larga historia de discriminación racial y de género en los Estados Unidos y a las importantes desigualdades en el acceso a las universidades de derecho y al ejercicio de la profesión de abogacía. Los estudios han demostrado que una judicatura diversa es importante para aumentar la confianza del público y su confianza en los tribunales y cortes, en especial entre las comunidades más desfavorecidas y con menos representación. Además, los estudios también ponen de manifiesto que la diversidad demográfica y profesional de los jueces y las juezas enriquece las deliberaciones en los tribunales y tiene repercusiones sobre la elaboración de las leyes.
En varios estados, las comunidades raciales y étnicas que representan una gran parte de la población estatal no se ven reflejadas en los estrados de las cortes supremas estatales. Por ejemplo:
- No hay ningún juez ni ninguna jueza de la comunidad latina en 15 estados donde esta comunidad representa por lo menos el 10 por ciento de la población (Connecticut, Delaware, Georgia, Idaho, Illinois, Kansas, Nebraska, Nevada, Carolina del Norte, Oklahoma, Oregón, Rhode Island, Utah, Virginia y Wyoming).
- No hay ningún juez ni ninguna jueza de raza negra en seis estados donde la población de raza negra representa por lo menos el 10 por ciento del total (Alabama, Arkansas, Florida, Míchigan, Pensilvania y Tennessee).
- Tres de los cuatro estados con las poblaciones nativas indígenas más grandes del país (Arizona, California y Nuevo México) no tienen ningún juez ni ninguna jueza de esa comunidad.
- Y del mismo modo, tres de los cuatro estados con las poblaciones asiática-americanas más grandes del país (Nueva Jersey, Nueva York y Texas) no tienen ningún juez ni ninguna jueza de esa comunidad.
Diversidad profesional
La experiencia profesional previa es otro aspecto importante en la diversidad de un tribunal y puede afectar la perspectiva de un juez o una jueza cuando están decidiendo un caso. El presidente Joe Biden ha priorizado aumentar la diversidad profesional en los tribunales federales, al reconocer que los abogados y las abogadas con experiencia como fiscales y abogados corporativos han sido siempre mayoría en los estrados, mientras que los jueces y las juezas con experiencia como defensores públicos, abogados especializados en derechos civiles o de servicios de asistencia legal civil y otros abogados que han atendido clientes pobres y marginalizados siempre han sido una pequeña minoría en los estrados de los tribunales superiores.
El Brennan Center evaluó los antecedentes profesionales de todos los jueces y todas las juezas en ejercicio de las cortes supremas estatales y categorizó su experiencia jurídica previafootnote2_mILUfPa4oNiiMs6OTiWWxBHI8dDAbWsIT7fucMnJCzE_zTKMxyGD73R22Nuestra metodología fue de la siguiente manera: Evaluamos las biografías oficiales de todos los magistrados y todas las magistradas de las cortes supremas estatales y categorizamos sus afiliaciones profesionales del siguiente modo: juez, académico (incluso en grupos de expertos y cargos académicos de tiempo parcial, tal como profesores adjuntos), sector privado/firmas de abogados, abogado corporativo, secretario judicial, abogado/personal judicial, abogado integrante de grupos de presión, defensor público, servicios de asistencia legal civil, fiscal, fuerzas policiales (que no sea parte de la fiscalía), abogado del gobierno estatal/local (que no sea parte de la defensoría pública/fiscalía/poderes políticos), abogado del gobierno federal (que no sea parte de la defensoría pública/fiscalía/poderes políticos), abogado del despacho del gobernador, abogado de la legislatura, funcionario electo/estatal, fiscal general, gobernador, legislador estatal, otros funcionarios electos, abogado en organizaciones sin fines de lucro (de todo el espectro político) y otros. Categorizamos a los jueces y las juezas con estas experiencias profesionales si trabajaron en cualquiera de esos sectores después de haber completado su educación jurídica (no se contaron pasantías). Utilizamos la siguiente lista de fuentes: biografías oficiales, comunicados de prensa de los tribunales y cortes, plataformas de campaña (para los cargos electos), Ballotpedia, LinkedIn y Wikipedia, e informes periodísticos. Si no hallamos algún dato, nos comunicamos con los despachos privados de los jueces y juezas.. Los datos revelan que hay ciertas experiencias profesionales que son mucho más comunes que otras en la judicatura suprema estatal.
La experiencia profesional más común de los jueces y las juezas de las cortes supremas estatales es la de abogado o abogada en firmas privadas (81 por ciento), seguida por otro cargo de juez (69 por ciento) y, por último, experiencia como fiscal (39 por ciento). En todos los 50 estados, por lo menos uno de los actuales jueces tiene experiencia en firmas privadas de abogados. En las cortes supremas estatales de 46 estados, hay por lo menos un juez o una jueza con experiencia como fiscalfootnote3_Si4v4WgESjK3HihL7cdUcmuJkwe9Sdb9DkAV6vb84I_prYLztNr9sWY3Si no pudimos determinar que un juez o una jueza que trabajó en una fiscalía general o en un cargo municipal hubiera atendido casos civiles o penales, no contamos a esa persona como fiscal. Por lo tanto, el número de jueces y juezas con experiencia en fiscalías representa un estimado inferior al real., mientras que, tan solo en 20 estados, hay un juez o una jueza con experiencia en la defensoría públicafootnote4_bBis89om6cPGeQDrsHrl56DmOVQ8KL75wQxtH4rMtQw_ctyMbrLgcPBP4Contamos como defensor público o defensora pública a toda persona que hubiera sido empleada para brindar servicios de defensoría para acusados sin recursos que no pueden costear su propia defensa, incluso defensores privados contratados por la Defensoría Pública..
En total, solo el 7 por ciento de los jueces y juezas de las cortes supremas estatales tienen experiencia como defensores públicos. Y un escaso 2 por ciento tiene experiencia como abogado o abogada de servicios de asistencia legal civil, es decir, profesionales que representan a personas de bajos ingresos en causas civiles, por ejemplo, en casos de desalojo. En las cortes supremas estatales, hay más jueces con el nombre de John (14, en total) que jueces o juezas con experiencia en servicios de asistencia legal civil (con un total de 8). Tan solo el 1 por ciento de los jueces hombres y el 4 por ciento de las jueces mujeres trabajaron en servicios de asistencia legal civil.
De los 25 magistrados y magistradas que asumieron su cargo en las cortes supremas estatales desde abril de 2021, 14 se desempeñaron como fiscales, dos como defensores públicos y dos trabajaron en servicios de asistencia legal civil. Comparado con las cifras del año pasado, el porcentaje de jueces y juezas actuales con experiencia en fiscalías aumentó del 37 por ciento al 39 por ciento, mientras que el porcentaje de jueces y juezas con experiencia en servicios de asistencia legal civil y en defensoría pública se mantuvo constante.
En las cortes supremas estatales, la proporción de magistrados y magistradas con ciertas experiencias profesionales varía según el origen étnico y racial de la persona. Por ejemplo, el 84 por ciento de los jueces y las juezas de raza blanca tienen experiencia en firmas privadas de abogados, comparado con el 53 por ciento de los jueces y las juezas de raza negra, el 80 por ciento de los jueces y las juezas de la comunidad latina, el 78 por ciento de los jueces y las juezas asiático-americanas, y solo uno de los cuatro jueces y juezas indígenas. De acuerdo con un informe elaborado en 2021 por la National Association for Law Placement, las personas no blancas componen el 19 por ciento de todos los abogados y todas las abogadas que trabajan en firmas privadas.
Es muchísimo más probable encontrar magistrados y magistradas de raza no blanca con experiencia como fiscales que de raza blanca. En total en las cortes supremas estatales, el 36 por ciento de magistrados y magistradas de raza blanca se desempeñaron como fiscales, en comparación con el 55 por ciento de magistrados y magistradas de raza no blanca. En particular, el 50 por ciento de jueces y juezas de raza negra, el 60 por ciento de jueces y juezas de la comunidad latina, el 44 por ciento de jueces y juezas de origen asiático-americano y dos de los cuatro jueces y juezas indígenas se desempeñaron como fiscales antes de llegar al estrado de la corte suprema de sus estados. Estos datos difieren de la demografía general en las fiscalías de todo el país: al año 2019, en los Estados Unidos, el 95 por ciento de los fiscales elegidos mediante el voto eran de raza blanca, de acuerdo con un estudio publicado por la Reflective Democracy Campaign.
De los 30 magistrados y magistradas que tuvieron un cargo electo no judicial antes de llegar a una corte suprema estatal, 28 son de raza blanca. Y el 13 por ciento de los jueces hombres y tan solo el 4 por ciento de las juezas mujeres antes ocuparon cargos electos no judiciales.
Tener diversidad en los tribunales y las cortes inspira la confianza del público en la justicia y es esencial a la hora de lograr un sistema judicial justo e imparcial. Aunque sí hubo algunos avances positivos, los estrados de las cortes supremas estatales siguen quedándose cortas en este importante sentido.
Traducción de Ana Lis Salotti.
CORRECCIÓN: La versión original de este recurso indicó que tres de los cuatro estados con el número más alto de nativos americanos, y que no tienen jueces nativos americanos en sus cortes supremas, eran Arizona, California, and Texas. Los estados correctos son Arizona, California y Nuevo México.
End Notes
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Este análisis se basa en datos que muy gentilmente el profesor Greg Goelzhauser de la Universidad del Estado de Utah compartió con el Brennan Center y que incluyen información demográfica de los magistrados y las magistradas que formaron parte de las cortes supremas estatales entre 1960 y 2014. El Brennan Center actualizó esos datos para cubrir los años que le siguieron hasta el 2022 y agregó información demográfica más detallada y datos sobre la experiencia profesional de jueces y juezas. Para identificar su raza, etnicidad y género, el Brennan Center analizó fuentes secundarias con un alto nivel de credibilidad como, por ejemplo, declaraciones biográficas, obituarios, artículos periodísticos y membresías declaradas de organizaciones afines. En los casos donde no había ningún dato público disponible sobre la raza o etnicidad de un juez o una jueza, nos comunicamos directamente con los tribunales. Con esta metodología, no pudimos verificar la raza ni etnicidad de 6 de los 340 jueces y juezas en ejercicio. Por lo tanto, estas personas fueron categorizadas como jueces que “no se han identificado públicamente como personas no blancas”. -
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Nuestra metodología fue de la siguiente manera: Evaluamos las biografías oficiales de todos los magistrados y todas las magistradas de las cortes supremas estatales y categorizamos sus afiliaciones profesionales del siguiente modo: juez, académico (incluso en grupos de expertos y cargos académicos de tiempo parcial, tal como profesores adjuntos), sector privado/firmas de abogados, abogado corporativo, secretario judicial, abogado/personal judicial, abogado integrante de grupos de presión, defensor público, servicios de asistencia legal civil, fiscal, fuerzas policiales (que no sea parte de la fiscalía), abogado del gobierno estatal/local (que no sea parte de la defensoría pública/fiscalía/poderes políticos), abogado del gobierno federal (que no sea parte de la defensoría pública/fiscalía/poderes políticos), abogado del despacho del gobernador, abogado de la legislatura, funcionario electo/estatal, fiscal general, gobernador, legislador estatal, otros funcionarios electos, abogado en organizaciones sin fines de lucro (de todo el espectro político) y otros. Categorizamos a los jueces y las juezas con estas experiencias profesionales si trabajaron en cualquiera de esos sectores después de haber completado su educación jurídica (no se contaron pasantías). Utilizamos la siguiente lista de fuentes: biografías oficiales, comunicados de prensa de los tribunales y cortes, plataformas de campaña (para los cargos electos), Ballotpedia, LinkedIn y Wikipedia, e informes periodísticos. Si no hallamos algún dato, nos comunicamos con los despachos privados de los jueces y juezas. -
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Si no pudimos determinar que un juez o una jueza que trabajó en una fiscalía general o en un cargo municipal hubiera atendido casos civiles o penales, no contamos a esa persona como fiscal. Por lo tanto, el número de jueces y juezas con experiencia en fiscalías representa un estimado inferior al real. -
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Contamos como defensor público o defensora pública a toda persona que hubiera sido empleada para brindar servicios de defensoría para acusados sin recursos que no pueden costear su propia defensa, incluso defensores privados contratados por la Defensoría Pública.