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Este año, montones de estudiantes universitarios votarán en las elecciones presidenciales por primera vez. Pero para muchos de esos votantes, será una experiencia confusa y frustrante, en vez de una celebración y de orgullo cívico.
Todo ciclo electoral produce nuevas quejas debido a obstáculos y retrasos en los lugares de votación de las universidades. En años recientes, impugnaciones administrativas sobre la implementación de nuevas leyes de votación, incrementos en la inscripción el mismo día de las elecciones, aumentos imprevistos en la participación de votantes e insuficientes recursos y capacidad técnica obligaron a estudiantes en California, Míchigan, Pensilvania y Texas (entre otros estados) a esperar en largas filas para emitir su voto. Leyes más estrictas de identificación de votantes e inscripción electoral en varios estados dificultaron aún más la votación de los estudiantes.
Algunas jurisdicciones enfrentan otros problemas, como recintos universitarios que se dividen entre varios distritos, lo que aumenta la confusión entre los estudiantes sobre cómo y dónde votar.
Otros problemas se originan en los patrones de votación de los estudiantes, que son distintos a los de la población en general. Los estudiantes que votan acuden a las urnas a diferentes horas y, con frecuencia, en grupos. Es menos probable que tengan licencias de conducir del estado donde emiten su voto, y a menudo tienen una dirección temporal o que ha cambiado.
Muchos estudiantes también votan por primera vez, por lo que no están familiarizados con el proceso electoral. Incluso si ya votaron antes, los estudiantes de otro estado pueden enfrentar reglas y procedimientos difíciles de entender. Y en este ciclo electoral, las inquietudes sobre la seguridad y las alteraciones debido a manifestaciones en universidades y la intimidación de votantes tal vez intensifique estas dificultades.
Estas preocupaciones exigen planificación específica y estratégica para la resiliencia. La administración eficaz de las elecciones en los recintos universitarios requiere un entendimiento de la diversidad de situaciones, estrategias adaptables y solución creativa de problemas para superar los obstáculos singulares y asegurar el acceso y la eficiencia.
Esta inquietud no se limita solamente a los estudiantes; otros grupos demográficos y comunidades también enfrentan obstáculos particulares que deben abordarse cuidadosamente.
El propósito de este documento es atender problemas específicos de los votantes universitarios que votan en persona de maneras distintas a las prácticas generalizadas.
Las recomendaciones se basan en conversaciones entre el personal del Brennan Center, estudiantes universitarios y funcionarios electorales que atienden comunidades universitarias en varios estados con diferentes leyes electorales y diversos entornos culturales, demográficos y políticos.
La guía, al final de este documento y en inglés, destaca las formas en que los funcionarios electorales y los sectores universitarios involucrados pueden colaborar a fin de asegurar que los estudiantes puedan votar y hacerse escuchar.
Ahora que los estudiantes vuelven a las universidades y se acercan las elecciones generales, adoptar estas medidas ayudará a los funcionarios a prepararse para este ciclo de 2024 y ciclos electorales futuros.
Traducción de Keynotes Translations and Editorial Services
